Después de muchos años pescando con mosca; (desde 1985) me doy cuenta que muchos pescadores que la practican o desearían practicarla, creen que las únicas especies pescables con mosca son los salmónidos (truchas y salmones) en la Patagonia, y quizá por falta de información no disfrutan de otras posibilidades y especies, por ejemplo: dorados, tarariras, palometas, dientudos, pejerreyes, carpas,  etc., todos los tenés acá cerquita. Tanto en lagunas, lagos, ríos, el mar; sin desmerecer a su majestad la trucha, que por lo general con su pique y su entorno paisajístico son muy atractivos. Pero debido a los elevados costos de traslado e imposibilidades de traslados por los eventos ya conocidos, muchos aficionados no desenfundan los equipos, o lo hacen una vez en el año; sin siquiera intentar otras posibilidades muy cercanas. O también hay muchos pescadores que les gustaría  pescar con mosca y no se animan debido a varios motivos, algunos por lo referido al desconocimiento sobre otras especies que se pueden pescar; otros tienen miedo de gastar mucho dinero  en equipos y que luego no los satisfaga, sin saber que muchos instructores les  pueden enseñar facilitando equipos propios y así dar los primeros pasos y  probar (de esta manera yo acostumbro a enseñar), también a niños o mujeres, que la mayoría de las veces no se animan, cuando en realidad son muchas las que gustarían comenzar a practicarlo y participar en las excursiones de pesca con sus amigas o parejas, y en el caso de los niños  con equipos adecuados  a su posibilidad física; siempre en alguna laguna o arroyo, pescando tarariras cerca de Junín; Luego y con el correspondiente asesoramiento decidirse a comprar el equipo adecuado y mas versátil de acuerdo a su presupuesto.  Yo por ejemplo comencé allá por 1985 con uno medianamente económico que adquirí por teléfono en Buenos Aires y con ese equipo pesqué pejerreyes (mi primer captura con mosca), tarariras, dorados y truchas (equipo que todavía conservo), o sea, hay para todos los gustos y presupuestos, por eso lo ideal es que antes de adquirirlo asesorarse por otros pescadores o mejor aún un instructor; pero lo más importante es no quedarse con ganas.

 

También puedes aprender a hacer tus propias moscas; así cuando culmina la temporada de pesca o los fríos del invierno no te permiten salir, una buena alternativa para seguir soñando con la próxima, es poder plasmar ideas y algún invento arriba de un anzuelo, que aparte de llenar la mesa de plumas y pelos, que alguien de la casa nos querrá tirar a la basura, no importa, seguí y soñá, algún pez te lo devolverá con la explosión de un pique o un hermoso salto, al cual le devolveremos la cortesía retornándolo a su elemento sin dañarlo, para que algún día cuando todos los pescadores entendamos esto podamos decir que todavía hay peces de buen tamaño en muchos ambitos.

Si no comenzamos a proteger el medio llegará el día que no tendremos donde practicar o solo lo podremos hacer en muy pocos cotos privados carísimos, en Argentina también hay lugares privados, pero todavía están al alcance de la mayoría y lo diferencia de los lugares públicos solo en los servicios, a veces también el tamaño de peces y privacidad. Ya sé que a muchos pescadores le es difícil volver a casa sin traer pruebas que destaquen su vanidad, yo también en mis comienzos me traía algún pescado; pero cuando te acostumbras a la pesca con devlución te das cuenta que no solo es una buena acción, que nos hace sentir bien y veremos que vale más una foto o un recuerdo que mil pescados muertos.

 

Otro problema que vemos los pescadores es la basura que se arroja a orillas del camino, arroyos, lagunas, etc. Se suelen ver envases de insecticidas, repelentes y los siempre presentes pañales descartables, que seguramente no los arrojarían en el patio de su casa, todo esto contamina y envenena el medio ambiente. Una pequeña solución es llevar una bolsa de residuos, juntarlos y luego depositarlos en contenedores al efecto o sacarlo para los recolectores municipales junto con los de nuestra casa. Es así de simple siempre podremos disfrutar de nuestras salidas (inclusive de turismo o familiares) sin suciedad para la vista y olfato.

Por último disfrutar este maravilloso deporte.

Pepe Perrone